Supervivencia Apocalíptica | Jorge Caneda

La serie de supervivencia que se aleja de los típicos cánones del género Z.

Dicen, gente que sabe más que yo, que la ficción ayuda a la supervivencia.

Que leemos para escapar, pero también para aprender.

Y tú…

¿Lees, o te estremeces pensando que un día se acabará todo?

Este contenido no te va a salvar la vida, pero quizá te ayude.

Si te gusta leer, claro.

Si aprecias tu vida y la de los tuyos, querrás leer estos libros.

Regreso a Costa do Medo

Samuel y su hija Leonor viajan desde la capital hacia la costa norte.

Huyen de una infección que afecta a la humanidad.

Después de repostar en una gasolinera, las duras restricciones de abastecimiento de la zona les impiden continuar su trayecto.

El hombre, obcecado con llegar cuanto antes a la vieja casa abandonada de sus padres, al borde del acantilado, toma una decisión que los llevará a descubrir la verdadera cara de la infección de la que huyen.

Las Horas Muertas

Samuel e Izan viven aislados en una casa al borde del acantilado.

Hace años que no ven un infectado de cerca.

El anciano, testigo del mundo previo al apocalipsis climático que estalló hace décadas, está obsesionado con sobrevivir lejos de los zombis y del contacto humano.

A diario lucha contra las inquietudes de su nieto, quien ansía saber qué habrá más allá de las estacas que los protegen.

La rutina diaria se rompe cuando Samuel lleva por primera vez al joven a explorar un pueblo abandonado.

Allí encontrarán un cuaderno con un extraño mensaje.

Los Hijos de Las Fragas

La Meiga, o bruja, de la secta de Las Fragas, es la líder absoluta de un grupo de supervivientes que habita en los árboles del bosque. Somete y domina a todos con el terror y el miedo.

Pero el miedo está en todas partes.

En los zombis que protegen el campamento de cabañas en los árboles.

En los perros que actúan como lobos.

Y en los extraños que llegan hasta allí. Perdidos. Encontrados.

¿La supervivencia en un apocalípsis depende de seguir escondidos y procrear para que no se pierda la especie?

¿O quizá depende del estudio y el análisis de las circunstancias que nos han llevado hasta allí para intentar modificar el destino con conocimiento?

ENLACES DE DESCARGA:



Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *