1982. Abigail Baxter encarna el modelo de chica ejemplar: es la primera de su clase, siempre está dispuesta a ayudar a los demás y nunca falta al sermón de los domingos en la iglesia de su padre. Pero cuando conoce a Scott Schwartz, un chaval judío de dudosa reputación y aficionado a las recreativas, un secreto se origina entre ellos, uno cada vez más grande y más difícil de ocultar.