“Tengo un aceptable pasar económico. Un empleo que me permite subsistir y pagar una hipoteca a fin de mes, viajar por el mundo y gastar dinero en cosas superfluas.
Poseo una buena figura 100% natural, a base de una alimentación sana y ejercitación periódica; un cabello espléndido y oscuro, brillante gracias a mi sesión semanal de estilista y un cutis rozagante.
Soy una mujer con clase, con un nivel cultural considerable si se tiene en cuenta que jamás hube pisado una Universidad y me caracterizo por tener un exquisito gusto por lo refinado. Quizás en demasía.
Los que me conocen, saben que nada me resulta imposible. Obtengo lo que quiero sin importar los medios para conseguirlo.
Los que me desconocen, ignoran que soy una chica infeliz con una infancia carente de afecto y ostentaciones, con desigualdad y maltratos de toda clase.
Soy la noche y el día. Soy el calor y el frío. Soy la mujer de la que todos quieren presumir… porque yo soy la perfecta dama de compañía.”
Innovadora y con diálogos por momentos hilarantes, en “Dama de Compañía” podremos encontrar una protagonista con un perfil psicológico fuerte y desafiante que no tardará en mostrar a la mujer debajo de la máscara. Real, contemporánea y con sugerente contenido erótico, resulta ser una construcción palpable del vínculo intrínseco entre mente y corazón, hasta decantar en una historia de amor atractiva y desprejuiciada.