Math Damon, futbolista de élite, genio frustrado (en muchos aspectos), rico, famoso y deseado por todas las mujeres excepto por la que él siempre deseó. Sí, la vida que eligió le ha llevado al éxito social y mediático, pero no a la felicidad. Hasta los genios pueden equivocarse, aunque eso Math lo negaría frente a sus amigos y se haría el sueco, como si eso de ser un genio no fuera con él, si la prensa estuviera cerca. Carol Santos, divorciada y fisioterapeuta de profesión, es una mujer de sonrisa fácil con unos cuantos quilos de más, que no parecen dispuestos a dejarla en paz, y que ha perdido la fe en los hombres, pero no en los perros. Quizás por eso dejó atrás los sueños que tenía siendo una niña para centrarse en el bien del prójimo. Del prójimo que lo merece, vamos. O séase, de los babosos, peludos y a veces flatulentos perros con los que vive o que pasan por la asociación en la que se deja la paga y prácticamente su vida mientras les busca un buen hogar. Algo que no siempre es fácil. Dos personas cuyas vidas no parecen tener relación ni conexión alguna, pero en la física cuántica dos partículas que han estado en contacto en algún momento, pese a no compartir el mismo espacio físico, pueden estar en conexión. ¿Será Math capaz de resolver la compleja ecuación que le lleve a la felicidad? ¿Será Carol capaz de confiar en un varón que usa la bipedestación y mea en la taza del váter y no en el tronco de un árbol? Un hombre, una mujer, unos pocos buenos amigos y unos cuantos hocicos entrometidos. ¿Quieres descubrir su historia?