¿Qué sentirías si un solo encuentro provocase que tu pasado y tu presente se dieran la mano mientras que apenas crees lo que ves?
Soy Daniela y te lo puedo contar porque me sucedió no hace tanto. Sentí hervir la sangre en mis venas y pensé en que la mayor de las injusticias me acababa de asaltar.
Demasiado tiempo detestando a Leo. Años de soledad y sufrimiento y, un buen día, se cruza en mi vida con una sonrisa que deseé borrarle de un plumazo y para siempre.
Soy Leo y entiendo a Daniela. Ojalá no pensase así, pero la defraudé. Lo hice y es hora de asumir las consecuencias.
No estaremos solos en esta historia, en la que ya comprobaréis que somos tres, y en la que se dan cita la risa y el llanto, envueltas en un sinfín de emociones que te harán suspirar.